Queridos amigos, hay muchas maneras en las que Dios nos habla, pero parece que nosotros no tenemos problemas para escuchar, pero sí para entender lo que trata de decirnos muchas veces. El terremoto que nos afectó en febrero del 2010, no solo remeció nuestro país, sino que al parecer también quiere remecer nuestro corazón y recordarnos que su venida esta cerca. Hemos escuchado tantas veces que "Él viene" y muchas veces coreamos aquella arenga con un fuerte amén, pero ¿qué hacemos? ¿qué frutos damos que muestran que estamos esperándole? y ¿nace en nosotros un deseo más grande de predicar el evangelio? porque creo que ese es el mensaje central de este es Jesucristo
Dios le bendiga.